La familia
Martínez, propietaria del Pazo de Quintáns,
mostraron siempre un interés muy especial en conservar
las valiosas construcciones que se encuentran en esta
finca, así como su carácter agrícola.
En el año 1992, contactaron con nosotros para
desarrollar un proyecto de reforma y rehabilitación
del Pazo para su uso particular como residencia habitual
de la familia.
Diez años después, de nuevo, los propietarios
volvieron a ponerse en contacto con nosotros, para
intentar reconvertir el Pazo en un Hotel Rural especializado
en el vino, siguiendo los mismos criterios de conservación
y respeto al edificio existente que ya guiaron el
proyecto de 1992.
El Proyecto de restauración y rehabilitación
aborda tres fases que se interrelacionan estrechamente:
por un lado se pretende rehabilitar y convertir en
hotel al Pazo sin introducir elementos que lo distorsionen,
intentando la mínima intervención y
la conservación de los espacios y sus características
propias. Por otra parte las construcciones auxiliares,
que cobran importancia puestas en relación
con el Pazo y con el patio, se adecuan para ser utilizadas
como salones de festejos y bodega con zona de catas
y espacios dedicados al mundo del vino. Además
se prevé la construcción de un edificio
anexo de habitaciones.
Este pabellón se situaría en la pradera
delantera del Pazo, mirando hacia ella y abriéndose
a las vistas, que desde esta zona son espectaculares,
y gozando a su vez de la cercanía de la viña.
Se crea un espacio entre el Pazo y este anexo acotado
por ambas edificaciones y la pérgola por donde
se entra al complejo. Se potencia una relación
visual entre ambas edificaciones y un diálogo
entre lo moderno y lo antiguo, desde el respeto a
la historia y al lugar.
Proyecto: Olmos Ochoa Arquitectos
Colaboradores:Marcela Conci